martes, 31 de julio de 2007

lunes, 30 de julio de 2007

La ovejita

Noche de luna llena. Oscuridad. Caminas por la calle y te das cuenta de que estás sola de que no hay nadie contigo ni nadie a tu alrededor. Oyes ruidos extraños, pero no te asustas, sigues tu camino hacía casa. Hace calor. Subes una calle y te encuentras a una oveja. Beeeeeeeeeeeeeee. Te mira y bala de nuevo. Beeeeeeeeeeeeee. Crees que estás soñando. Miras a todos lados, en busca de alguna explicación. ¿Qué demonios hace una oveja en medio de una calle en la ciudad? Beeeeeeeeeeee. Parece que te está llamando. Te acercas cautelosamente aunque no sabes porque. La ovejita es relinda. Con su pelaje blanco en pleno verano, parece mullidita pero debe estar pasando un calor infernal. Beeeeeeeeeeeeeeeee. Te acercas y la acaricias suavemente en el lomo. Ella levanta la cabeza. Beeeeeeeeeeeee, sonríe y la boca se le hace cada vez más grande. Le salen una colmillos enormes y de golpe y porrazo es más grande que tú y en vez de hacer un triste beeeeeeeeeee, hace un gran AAAAAAAAAAAAAAUUUUUUUUUUUUU!! Y te come de un bocado. Eso por tonta y fiarte de los corderitos. El lobo tiene la tripa tan llena que casi no puede moverse. De pronto, ummm, algo raro pasa, piensa el lobo: no debí comérmela de un bocado, creo que se me ha indigestado. Y de golpe y porrazo una hoja afilada le atraviesa el estómago peludo, le abre un gran tajo de arriba a abajo con una navaja albaceteña y se abre paso una mano, luego un brazo, una cabeza, un torso que lucha por salir a la superficie y respirar. Ya está libre, por fin. El lobo coleando los últimos estertores la mira con cara de tonto y ella le dice: Esto, me lo enseñó mi amiga caperucita. Le tira un escupitajo encima y se va tan campante a casita pensando, qué asco dan los jugos gástricos por dios, me voy a dar un buen baño que apesto a lobo. ;-)

p.d. Echaba de menos a caperucita.

Otro grande que se va...


Ingmar Bergman.

viernes, 27 de julio de 2007

Frío

Duele. Me duele. Hace frío y duele. El mar helado me envuelve y no me deja respirar. Atrapada debajo de este tempano de hielo, sin salida. Duele. Me duele. Hace frío y duele. Nado sin rumbo fijo ni dirección, solo buscando una salida hacia el exterior, hacia el aire, hacia poder respirar. Todo está oscuro, la luz está al otro lado. Me duele el cuerpo, el frío es penetrante, hiriente, si sigo así más tiempo no podré moverme. Nado, nado, nado...Y entonces la veo, una brecha, una salida, una oportunidad. Nado hasta ella y con el cuerpo dolorido salgo a la superficie. Hago fuerza apenas y al salir respiro y cuando lo hago todo el cuerpo me tiembla y se resquebraja, el aire me mata, duele, me duele. Nunca debí salir. Me sumerjo de nuevo y sigo nadando. ¿Quién me dijo a mí que yo era animal de tierra cuando siempre he sido un pez? Es que no me gusta el frío.

Depp, barbero satánico de fleet street


Johnny Depp como Sweeney Todd, lo nuevo de Burton. Me encantó el musical cuando lo ví en Barcelona dirigido por Mario Gas e interpretado por el gran Constantino Romero y VickyPeña. Estoy deseando ver que ha hecho Burton con él.

jueves, 26 de julio de 2007

...

He visto lo mismo mil veces. Estoy metida en un bucle infinito. Me dejo llevar, es lo que hago, estar ahí, presente, ser testimonio. ¿Testimonio de qué? ¿Para qué? ¿Para quién? La gente me empuja, me zarandea de un lado al otro. La música suena alta. El escenario está vivo. La gente a mi alrededor grita. Hace tiempo que veo las mismas caras y la misma gente haciendo lo mismo. ¿De verdad sienten algo? Miro al escenario, las luces me ciegan, la música, ¿dónde está la música? No oigo nada. Sólo veo el marasmo en el que estoy metida de lleno. Me dejo llevar. Cierro los ojos. Cuando los abro, estoy sola. No hay nadie. Las luces están apagadas, el escenario vacío. Miro a todos lados. No me extraña. Miro mis pies. Están descalzos. Los pantalones de campana me rozan el suelo. No me importa. Cierro los ojos. Me balanceo y cuando los abro de nuevo, la música ha vuelto de golpe, la marea humana me mueve. Simplemente, me dejo llevar...

lunes, 23 de julio de 2007

¿Mi sueño?

Campos extensos y verdes. ¿Dónde demonios estoy? Esto parece Escocia. No estoy sola. Hola. Hola, responde. No sé que hago aquí. Creo que estoy soñando. ¿Y tú?, pregunto. Yo también creo que estoy soñando. ¿Pero este es mi sueño o el tuyo?, me dice. No lo sé. Yo diría que es el mío, contesto. Nos miramos. Nos conocemos. Sabemos quien somos. Miramos alrededor en busca de una pista. Esto es tan real que parece que no es un sueño pero estamos seguros de que lo es. ¿Es suyo o es mío? Deberíamos marcharnos, dices. Hace frío, le respondo. Busquemos un lugar donde resguardarnos. En mitad de la nada verde hay una casita de madera. Pasamos la noche allí, acurrucados bajo unas mantas. Dormimos y cuando despertamos ya no estamos allí. Yo estoy en mi cama y él, supongo que en la suya. Días después nos encontramos en la calle caminando por el centro. Nos vemos y nos paramos de golpe. Él sabe, yo sé. Nos acercamos. Era mi sueño, repetimos al unísono. Y nos ponemos a reír. Te invito a una cerveza, dice. Y yo acepto. Fin.

Cucú!










La mejor forma de empezar la semana...;-)

domingo, 22 de julio de 2007

No recuerdo...

No recuerdo el ayer. No recuerdo el mañana. Ni tan solo recuerdo el hoy. Tampoco me importa. Tengo sueño. No sé a donde iré ni lo que busco. Sólo sé que quiero avanzar, que todo está ahí a mi alcance, que lo puedo tocar, que lo puedo sentir. Quizá tenga que pegar un gran salto, pero ya salté antes. Hacía delante, hacia atrás, en el mismo sitio sin moverme, pero salté. Salté y me caí muchas veces. Me hice daño. Pero seguí saltando. Unas veces me costó más que otras. Pero seguí saltando. Ya no recuerdo el ayer, ni el mañana, ni el hoy. No recuerdo nada. Solamente soy. Salto porque soy y quiero seguir siendo. Sin pasado, sin presente, sin futuro. Solo yo. Sin artilugios, sin aditivos, sin florituras. Solo yo. Esencia de mí. Salto.

Blup blup blup blup


jueves, 19 de julio de 2007

Click

Click, el mundo pasa ante mí en un supiro. Click, respiro. Click, vivo. Click, soy. Todo se reduce a eso. Click. Un instante. Click. Una sensación. Click. Un pensamiento. Click. Una emoción. Click. Click. Click. Click.

viernes, 13 de julio de 2007

Feliz finde!!!!!!!


Reconstrucción

Soy una casa en reformas. He tirado paredes que ni sabía que existían pero que algún día construí. Ahora tengo un martillo enorme, un traje blanco y una mascarilla, estoy en plena demolición. Derribar paredes es divertido. Zas, zas, pum, pum y caen como si nada. Al principio tenía miedo de que esas paredes caídas afectaran a la estructura de la casa pero lo cierto es que la casa sigue en pie firmemente. No eran tan importantes. Voy habitación tras habitación. Abro una puerta y me preparo para sopesar. Esta si, esta no, esta me lo pienso luego. Zas, zas, pum, pum. Otra pared abajo. Zas, zas, pum, pum. Retiro la runa y siguiente habitación. Pero que bonito me va a quedar esto...

lunes, 9 de julio de 2007

Thelonious Sphere Monk























Gracias a él me enganché al jazz. Foto: Pannonica de Koenigswarter.

viernes, 6 de julio de 2007

Doble ración de popo, porque vosotros lo valéis...

Leches que contenta estoy...aunque la regla me está matando, feliz finde a todos!!!!!!!!











Revolución

Esta mañana al levantarme me he mirado al espejo y no me he reconocido. No es que no fuera yo, es que era una yo diferente. Anoche tuve una revelación en la que vi como el mundo cambiada y yo con él. Mi cuerpo se fue deconstruyendo para volverse a construir, ya de forma diferente. Fueron cayendo las capas una por una: piel, músculo, huesos,...y volvieron a armarse de nuevo formando un nuevo yo. Me cuesta pensar con claridad que significa todo esto para mí. Aunque sé que el mundo ha cambiado conmigo y que ahora todo es diferente. Lo más probable es que nadie note el cambio excepto yo. Ha sido una revolución interior. Un cambio de moléculas. Solo yo fui capaz de captarlo en mis sueños. Soy consciente de ello mientras miro en el espejo y veo lo nuevo que hay en mí. Aquello que a simple vista, el ojo humano no puede ver, pero que yo gracias puedo ver perfectamente. Ahora todo es diferente. Lo curioso es mirar por la ventana y comprobar que todo sigue como sino hubiese pasado nada. Se ha producido una revolución, todo se ha deconstruido para volverse a crear capa a capa. Todo es diferente. El mundo. Yo. Todo. Y nadie lo nota, nadie lo sabe, nadie lo siente. Solo yo. Aún no estoy segura de si soy afortunada por haberlo notado. Ni siquiera sé si esto afectará a mi vida, lo único que sé es algo ha cambiado.

martes, 3 de julio de 2007

lunes, 2 de julio de 2007

Reflejo

Me he despertado. ¿Me he despertado o sigo soñando? Es de noche, estoy en mitad de la calle. Es una calle ancha y larga, hay árboles. Está desierta. Miro hacía los lados, no sé muy bien que hago aquí. De pronto el viento agita las copas de los árboles, miro. Siempre me ha gustado sentir el ruido de las hojas bailar a su son. Suena agua que corre. Cuando bajo la mirada, la calzada se ha convertido en un riachuelo. De agua clara y cristalina, se refleja la luna llena en sus tranquilas aguas que discurren parsimoniosas. Debería extrañarme pero no es así. Me acerco al agua. Tengo la necesidad imperiosa de tocarla. Esto lo he soñado muchas veces, tocar ese agua. Es como si me llamase. ¿Qué hay al otro lado? Me agacho. Dudo unos segundos, mis dedos la acarician suavemente mientras fluye. Parece un espejo, me veo a mi misma expectante, extasiada. Lo siento, al otro lado hay algo más. Algo que aún no he descubierto, algo que me está esperando. Ha llegado la hora de darme un chapuzón. Estoy descalza, pero no tengo miedo.