Cines en Santa Coloma, ¿motivo de celebración?

Después de muchos pero muchos años, creo que desde los 80, Santa Coloma de Gramenet vuelve a tener cines. Cinema City tiene 14 salas, está situada a los pies de esos espantos que son los edificios Cúbics, aquellos que tanto empeño tenía nuestro ex alcalde, Bartomeu Muñoz, en que se levantaran en la ciudad. Recuerden que está implicado en un escandalo de corrupción urbanística precisamente por su construcción dentro del caso Pretoria. El centro comercial en el que están aún no está acabado pero los cines muy apropiadamente se abrieron pocos días después de las pasadas elecciones municipales. Estaba yo muy contenta de volver a tener cines en mi ciudad, demasiado contenta me parece a mí. Hoy he ido a estrenarlos y así verlos con mis propios ojos. La experiencia no ha sido precisamente agradable, está claro que han abierto antes de tiempo y la organización brilla por su ausencia. El espacio para las taquillas es minúsculo para 14 salas y para colmo ni siquiera están habilitadas. Un cartelito anunciaba que las entradas se vendían en el bar de la primera planta.

Yo ya tenía la mía, la compré por internet para ahorrarme las colas, pero mira tú por donde, no me las he evitado, sino todo lo contrario. Al llegar, unas colas espantosas de gente se agolpaban ante los mostradores del bar, sin señalización alguna y sin que nadie se molestase en ordenar el desorden y el caos imperante, la gente se apelotonaba en la primera cola cuando había cuatro más disponibles, además de entradas en las cajas se vendían las palomitas y bebidas de rigor con lo que la cola se hacía el doble de larga en tiempo de espera. Si tenías comprada entrada por teléfono o internet lo mismo daba porque la cola era la misma con lo que casi no llego al inicio de mi película. El resto no es culpa del cine, hordas y hordas de familias con niños revoltosos incluidos agolpaban los cines. Los 10 primero minutos de sesión han sido un verdadero infierno. Había una familia que hablaba a gritos y toda la sala en pleno los ha tenido que callar. Un escándalo vamos. A mi por allí no me ven más el pelo. Creo que el complejo en sí se abre en octubre y que lo de los cines se ha debido a una precipitación monetaria o política, no lo sé, recuerden que se inauguraban un par de días después de las elecciones municipales, pero está claro que se han abierto antes de tiempo. Una lástima. Me quedo con mis cines en versión original aunque me tenga que ir a Barcelona. Donde esté un Verdi un Floridablanca o un Icaria que se quiten los demás, por mucho que estén a un tiro de piedra de mi casa.