martes, 30 de enero de 2007

Johnny Dos Caras


Hace días que el volcán que habita la montaña debajo de la cual vivimos entró en erupción. De momento solo expulsa gases y cenizas. Desde la terraza de casa en el último piso se puede ver la montaña humeante. Nadie parece tener miedo. Todo el mundo sigue como si nada pasase. Ni siquiera miran la actividad del volcán. Toda la ciudad está cubierta de cenizas. Una capa gris lo cubre todo. Mi hermano y yo hemos salido a la terraza, una capa espesa de cenizas la cubre como un manto de nieve gris en invierno. Andamos despacito, descalzos, el tacto es suave bajo nuestros pies. No queremos despertar a la ceniza y que nos bañe de grisura. Mi hermano me dice que ande con cuidado y que no sople. Si estornudas, la hemos liado, me dice. Nos han prohibido subir a la terraza, supongo que por la ceniza. Nadie sabe que estamos allí. No deberíamos estar allí. Nos acercamos a la barandilla. Un amigo nos ha dicho que hoy Johnny Dos Caras estará comiendo en el restaurante de enfrente, Don Vito. Es el mafioso más despiadado de la ciudad y todo el mundo le teme y le respeta por igual. Aunque seguramente, una cosa es consecuencia de la otra. Johnny tiene dos caras porque en una reyerta de juventud un rival le rajó se la rajó de arriba a abajo y se la dividió en dos. A veces si le miras fijamente puedes ver como un lado de su cara sonríe cruel mientras el otro muestra una seriedad que hiela la sangre. Aquella tarde, Johnny Dos Caras comía en Don Vito con Luigi Montesi, el capo de la mafia de la zona del sur. Ambos estaban intentando evitar una guerra entre familias. Uno de los nietos de Montesi había sido asesinado por un sicario, todos suponía que de la banda de Johnny, aunque este lo negaba y le echaba las culpas a Tono el Manco, el jefe de la familia del este, que se la tenía jurada desde que Johnny se hizo con el negocio de las basuras en toda la región. Mi hermano y yo, nos plantamos en la barandilla de la terraza a ver a Johnny muertos de curiosidad. Tumbados sobre la ceniza para que no nos vieran. Nuestra madre nos iba a reñir de lo lindo cuando nos viese entrar en casa rebozados en ceniza como una croqueta. Y mientras nos reíamos comentando lo bien que nos lo íbamos a pasar contando que habíamos visto a Johnny, el mismo Dos Caras salió del restaurante. En la puerta le esperaban sus dos hombres de confianza. Montesi le iba a la zaga. Parecían charlar animadamente después de una copiosa comida. Johnny se tocaba la tripa riéndose con su lado bueno mientras un rictus de seriedad le paralizaba el otro lado de la cara. Montesi le dio la mano a modo de despedida y entonces, un chirrido de ruedas que derrapan. Un coche negro pasó a toda velocidad delante del restaurante. Una ráfaga de ametralladora y las cuatro personas que estaban en la puerta cayeron desplomadas y cosidas a balazos. Mi hermano y yo abrimos los ojos como platos. Nos miramos asustados y a la vez emocionados. Johnny Dos Caras moría en esos instantes delante de nuestra casa sobre un suelo lleno de ceniza. Una guerra entre familias se iba a iniciar, correrían ríos de sangre. El caos imperaría en la ciudad. Y de pronto, el apocalipsis. El volcán entró en erupción, la lava salía a borbotones de su boca sin parar. Mi hermano y yo nos miramos extasiados. La guerra de familias ya no importaba. Todos íbamos a morir bañados por la lava. Nada más importaba.

10 comentarios:

SER dijo...

ey, solo he leido esta historia, pero me ha gustado mucho, sigue escribiendo, lo haces muy bien!

Mary Westmacott dijo...

Si, lenorable, es ud increible como escritora!, Vive ud en BCN?
Si Dios quiere seremos vecinas por un tiempo
=)

Mary Westmacott dijo...

Lenorabel....estoy tipeando muy mal ultimamente

lenoreanabel dijo...

Gracias, gracias y más gracias por pasaros por mi blog. Me alegro de que os gusten mis relatos compañeros empedernidos seguidores de la señora mayor. ;-) Anna carina, cuando estés por barcelona no dudes en darme un toque y nos tomamos unas copas juntas. Saludos mil.

Mary Westmacott dijo...

Que bueno que te guste mi Blog, es un honor, a mi me encanta el tuyo. Y si! nos tomaremos unas copas, ennnn la champagneria? xD

lenoreanabel dijo...

juer, SER, no puedo entrar en tu blog desde el curro a ver si puedo cuando llegue a casa!!!!!!!!

Mary Westmacott dijo...

Que tarada, me acabo de escribir este comentario a mi misma... =S
Si..yo no se sewr criptica, soy un estomago resfriado, no sabes cuanto mas me gustaria lo que vos haces. Al menos lo podria vender!! pero mis memorias quien las compraria?. Lo de BCN si, me encanta BCN, pero me da mucho miedo el cambio tambien, mi novio quiere que empecemos flia alla, y ami me encanta te juro, pero el tema de mi trabajo es todo un tema, creo que voy a aprender catalan o el acento español, porque aqui hablamos "che, she sho, sha" y todas esas cosas

Mary Westmacott dijo...

A ver..hagamos algo, pongamonos metas: para el año que viene mi novio, entonces marido y yo estaremos en BCN o no..no se..es que es dificil ponerse una meta cuando uno no sabe que coño va a pasar... =S
Pero bueno ahi vamos con las tuyas que al menos vives en tu pais, para el año que viene de todas formas iremos al casamiento de unos amigos alla, que son los dueños de la revista Lecool, conoces?. Y de paso iremos al cocktail de presentacion de tu libro vale?

Mary Westmacott dijo...

; )

MORELLA dijo...

Grande, grande, grande ... me quedo como Risto Mejide: sin palabras